SalvadorLeal.com

En el desenfreno de la moda, dos amigos más han entrado por la puerta grande al mundo del Blog, lo que me pone a pensar que tengo conocidos que son más pro-activos de lo que yo creía!

El primero de ellos vive en un pintoresco pueblecito de la provincia mexicana llamado Zapotlán el Grande. Esta población se encuentra en las faldas del volcán de Colima y al sur de Guadalajara. Si no lo han ubicado aún, quizás lo conozcan más por el nombre que utiliza para evitar que hordas de turistas lo descubran que es Ciudad Guzmán, Jal.
En el post más reciente de mi amigo, habla de la manera bastante sui-géneris en que nos conocimos (porque segurito estaban preguntándose cómo un chilango y un zapotlense podrían hacerse cuates), y ya no me acordaba de las condiciones tan anecdóticas en las que comenzó la amistad. Revísenlo aquí.

El otro cuate que acaba de comenzar su blog es un ‘ex-compañero’ de ‘trabajo’. A él le debo el haberme hecho pasar las mejores madrugadas de las que tengo memoria. Y no, no vayan a pensar mal; él solía tener un programa de radio que comenzaba los viernes por la noche y terminaba muy temprano el sábado. Su blog, aquí.

Bienvenidos sean. Ojalá que seamos más, muchos más. Si la razón por la cual no comienzan su blog es debido a que su jefe no lo ve con buenos ojos, denle click a este sitio e impriman las 95 tesis que sostienen al ClueTrain.

**SalvadorLeal.com y su Calificada Red de Distribuidores presenta**
¡¡EL CORREO!!

Así es mis estimados. Han llegado al buzón de correo electrónico algunas preguntas y sugerencias a las cuales daremos lectura y puntual respuesta.

(Salvador se sienta en su silla-mecedora, saca sus lentes bifocales y abre el Inbox de su correo electrónico)
La mayoría de las cartitas critican o pretenden señalar la fuerte carga egocéntrica que tiene www.salvadorleal.com y, sobretodo, su blog. (para quienes aún no sepan qué diablos es un blog, vayan a la página de Largo-Joe-José Manuel; el encontró una muy bonita e ilustrativa definición)

Por ejemplo, desde la colonia del Valle nos llega este correo que responde a la moda de poner los pensamientos personales en la red:
escribo para
decirle que mi vida se mantendrá fuera de los «diarios
virtuales públicos» al menos por el momento, ya que mi
Ego no me ha dado suficiente como para querer que la
vida del mundo gire alrededor de la mía… (algo así
como un big brother virtual)… con girar alrededor de
mi me basta… bueno, me despido, estaría bien
reunirnos pronto, parece que tiene mucha autoestima a
la que le urge tratamiento… y para qué son los
amigos!!
Como nuestro amigo dice, el blog es, en efecto, un tipo de Big Brother virtual que deja ver cosas más íntimas e interesantes que a la Chiva bañándose por la mañana (…bueno… esperen… déjenme reformular esa frase porque no estoy muy seguro de lo que acabo de decir…)
-ejem- Como nuestro amigo dice, el blog es, en efecto un tipo de Big Brother virtual que permite entrar en la parte tan íntima de una persona, que no puede siquiera ser reflejada a través de una cámara: el pensamiento.

En esta página que están leyendo hay, además, una gran variedad para escoger. El tema puede ser ‘serio’ pero no ser tratado con la solemnidad que podrían encontrar en un periódico o una revista especializada (nunca encontrarán mi artículo de las drogas en el «Junkie Weekly», por ejemplo) o también puede haber un tema de lo más relajado que es tratado con todas las de la ley (pequeño paréntesis… no saben cómo duele el p**** spinning de m***** después de la segunda clase).

En pocas palabras, aquí encontrarán escritos dirigidos para los dos públicos: los que gustan de ver a Joaquín López Dóriga y aquellos que disfrutan con Carmen Salinas.

Otra cartita que viene de la zona del Desierto de los Leones nos dice:
Primero que nada te quiero pedir que por favor cambies la foto que da
la bienvenida a tu site, hace mucho tiempo que no veía algo tan gay, por
fortuna creo que nadie en mi chamba me vio cuando entre a tu página.
Sólo espero que no termines como uno de los changos de Duran Duran que
decidió hacer un porno site con fotos suyas (spoooookie!).
El asunto de la foto ha levantado polémica pues este correo resume una opinión de varios lectores: ‘la foto de entrada es demasiado gay’

Primero. No creo que una foto mía violente la líbido y despierte excitación sexual de tal manera que podamos referirnos a ella como peligrosamente gay.
Segundo. No me gusta mucho que se use a la palabra ‘gay’ como adjetivo. Esta es una página que acepta a cualquier persona, sea cual sea su sexo, edad, ocupación o preferencia sexual. A las únicas personas que SalvadorLeal.com discrimina es a la gente que discrimina.
Tercero. Amiguito! Estás muy enterado de la vida de los de Duran Duran… ¿el gay no será otro de pura casualidad?

Tenemos un mail que hace referencia a medios de comunicación del pasado:
Para que sigas considerandome un fan del weekly Leal-online, aunque ya no exista. Esta buena tu pagina, te sugereria una edecan por mes.
En efecto… hace algunos ayeres existió un medio de comunicación llamado Leal-On-Line, del cual todos tenemos gratos recuerdos. Desgraciadamente, su vida se fue extinguiendo cual vela en ventisca pues otras responsabilidades profesionales me impidieron seguir con el proyecto. (comienza con w, termina con m y tiene enmedio una efe). De las edecanes… pues la idea no es mala; pero aquí creemos en la «especialización del trabajo» (cfr. Adam Smith), por lo que a riesgo de publicar verdaderos monstruos, mejor nos seguiremos dedicando a esto de la ‘escribida’. Luego me mandas un mail y te paso dos que tres links muy interesantes (insertar un guiño de ojo)

Finalmente tenemos a un despistado de la zona de Azcapotzalco que nos escribe:
¿cual es tu nuevo trabajo? me quedé en el de pg
feliz año
Mi estimado… ya prometí que en un post explicaré cuál es mi nuevo trabajo. Pero por si alguno de los que leen este blog aún no se ha enterado, Procter & Gamble ha dejado de recibir los servicios de su servidor.

Si alguno de ustedes desea conmunicarse con el autor de este blog, lo pueden hacer a: exlocutor@hotmail.com

Parece ser que se ha desatado una fiebre por los blogs. Aparte de mi amigo con problemas de personalidad (cfr. «What’s in a name» del 3 de enero) ya hay otros dos cuates que han comenzado a contar sus aventuras en internet.

El primero es un producto importado directamente desde Minatitlán, Ver. que ya tenía una página de internet (una de verdad, no como la mía) en donde además de publicar fotos de sus cuates suele dar rienda suelta a su vena poética.

El otro amigo que acaba de entrar en el rollo de los blogs escribió en su primer post algo que quiero retomar. De hecho, a él lo pueden escuchar todos los días a partir de las seis y media de la mañana por el 102.5fm en la Ciudad de México. Suele tener comentarios inteligentes y divertidos (afortunadamente son más lo segundo que lo primero) que opacan a los ya de por sí opacos conductores del programa.

En su post, mi cuate habla de lo devaluada que se encuentra la Navidad tanto en forma como -especialmente- en fondo. ¿Qué celebramos y por qué?
¿Qué tan conscientes estamos de nuestros actos y qué tanto actuamos porque así nos dicen que debemos actuar? ¿Qué tanta diferencia tenemos con las gallinas que ponen huevos cuando les encienden repentinamente las luces y nuestro comportamiento en cuanto comenzamos a ver arbolitos adornados y escuchar música navideña?

La Navidad está tan devaluada globalmente que en China, un lugar en donde actualmente se tolera más al capitalismo que a la religión, los oficiales del gobierno chino han decidido aprobar la Navidad por ser más un fenómeno consumista que una expresión religiosa (The Economist, December 20th 2003, p. 56)
¿No me digan que no resulta curioso que un análisis de instauración de política no haya generado preocupación el que la segunda fiesta más importante de una de las religiones con más adeptos en el planeta sea instaurada dentro de la ateísima y cerradísima sociedad china?

Quizás se vuelva un tema repetitivo en este blog, pero el núcleo del problema consiste en preguntarnos por qué hacemos lo que hacemos. Cuáles son las razones por las que tenemos el trabajo que tenemos o estudiamos la carrera que estudiamos, por qué tomamos/comemos/bebemos/esnifamos los productos que compramos, por qué celebramos las fiestas que celebramos.

No quiero verme ni ‘grinch’ ni mocho pues no me reconozco como ninguna de las dos cosas; sin embargo, resulta una lástima que podamos reducir una idea tan grande en un concepto tan vano. Digo, hasta para la persona menos interesada, la Navidad le podría resultar impactante tanto teológica como literariamente (un Dios que manda a su hijo a nacer entre las peores condiciones no suena al clásico cuento de hadas)… para que al final de cuentas todo se convierta en un pretexto para trabajar medio mes, comer mucho, beber más y gastar a todo lo que da.

Y si ustedes me dicen que uno de los propósitos de la Navidad sí se cumple pues finalmente te da una oportunidad de convivir con tu familia y tus amigos… quizás tengan un poco de razón. Pero entonces estoy realmente ardido por no haber podido celebrar con ustedes tan importantes fechas.

Resulta que no me ha gustado escribir desde siempre. El asunto de escribir y registrar los sucesos de mi vida o del mundo que me rodea no siempre me fue tan familiar (o necesario) como lo es ahora. Recuerdo perfectamente cuando yo deci­a «es que simplemente no me gusta escribir porque no puedo hacerlo».

A lo largo de mi vida he encontrado a muchas personas a las que no les gusta escribir y que tienen excusas tremendamente existenciales como: ‘escribir deja constancia de mis errores en el tiempo’ o ‘cuando escribes, no hay marcha atras’. La verdad, a mi no me gustaba escribir simple y sencillamente porque no podi­a, porque la cabeza no me daba para juntar varias palabras en una oracion, porque mi cerebro no solo no era capaz de recordar que los verboides no aceptan morfemas concordantes… ni siquiera sabia que eran los morfemas concordantes!!

Pero esa misma deficiencia de mi cerebro fue la que me empujo a escribir acerca de las cosas que me pasaban y asi evitar que los multiples productos que consumo y que matan neuronas hicieran un trabajo a todas luces irreversible. En pocas palabras, escribo para no olvidar lo que me pasa o lo que no me pasa; algunas veces (curiosamente, la mayoria) vivo cosas muy graciosas o muy extranas. Otras no lo son tanto. En otras ocasiones, escribo para no olvidar como pensaba yo acerca de algun tema que en ese momento sacudi­a la opinion publica.

Es con este pequeno texto que alude a la memoria y a la vida que a cada quien le toca vivir, que comienzo formalmente con esta especie de ‘diario digital’ al que lo han denominado Web Log o ‘blog’ para los cuates.

* Me acabo de dar cuenta que no puedo escribir con acentos o enies (las que utilizamos cuando decimos «ninio» o «pequenio». En cuanto sepa como diablos ponerlos… los usare. Mientras tanto: Viva la Anarquia Ortografica!!

Con este post se da por inaugurado el blog de www.salvadorleal.com
Más información, a la brevedad.