Archive for 2009
Quickie
Post rápido.
Leyendo una entrada de Wikipedia, me encontré con las reglas para historias cortas de Kurt Vonnegut. Aquí las dejo para futura referencia:
1. Use the time of a total stranger in such a way that he or she will not feel the time was wasted.
2. Give the reader at least one character he or she can root for.
3. Every character should want something, even if it is only a glass of water.
4. Every sentence must do one of two things—reveal character or advance the action.
5. Start as close to the end as possible.
6. Be a Sadist. No matter how sweet and innocent your leading characters, make awful things happen to them—in order that the reader may see what they are made of.
7. Write to please just one person. If you open a window and make love to the world, so to speak, your story will get pneumonia.
8. Give your readers as much information as possible as soon as possible. To hell with suspense. Readers should have such complete understanding of what is going on, where and why, that they could finish the story themselves, should cockroaches eat the last few pages.
Link.
¡Ah, sí! Y feliz 2010…
Mix
En las épocas de WFM recuerdo que se hicieron una serie de promos utilizando utensilios de todos los días: refrigeradores, cucharas, cacerolas. No recuerdo el copy del promo pero creo recordar con que la música electrónica de la estación (en forma de mix) estaba (o podía estar) en todos lados.
Hoy me encontré este video que, aparte de estar alucinadísimo, me hizo recordar esos promos.
Looping Around The House from Si on Vimeo.
Comin’ back
¡Y que regreso al blog!
Perdón, perdón. Siento mucho haberme ausentado pero Twitter (y el trabajo, y la maestría, ajem) han ido consumido cada vez más el tiempo que le dedicaba a mi juguete virtual. Además, más que escritor de un blog, poco a poco me he vuelto más bien un lector profesional de blogs y contenidos web; con el Google Reader y Facebook puedo compartir lo que leo que, finalmente, dice muchísimo de lo que traigo en la cabeza. Claro, faltaría un post para amarrarlo, pero o leo, o escribo, o trabajo.
Resulta que en un poquito más de un mes, mi blog cumplirá seis años. Un sexenio nomás. Supongo que habrá que hacer campaña para ver si me reeligen por otro periodo, je. En el transcurso de los próximos días trataré de ponerme al corriente en mis posts atrasados. Tengo en los drafts un par de anécdotas que sé que serán del gusto del respetable y que nomás encuentre unos minutos para redactarlas, estarán arriba. Mientras, recurriré a la lista de «cosas que tengo que postear algún día» para contarles lo que me ha llamado la atención en estos meses de ausencia.
1. Seguro que ustedes están familiarizados con los husos horarios, esta serie de gajos en los que está dividido el planeta y que permite saber cuántas horas de diferencia hay entre un país (o una ciudad) y otro. Por ejemplo, si ustedes están en México y quieren saber qué hora es en Londres, uno le suma seis o siete horas, dependiendo de la época del año. Para NY son una o dos, etcétera.
Sin embargo, buscando la diferencia de horarios con Venezuela me enteré que uno tiene que sumar una hora y media a la hora de México. Es decir que Venezuela dijo «para qué usar husos horarios completos si podemos usar también medios husos horarios». Raro, pensé. Pero resulta que no sólo Venezuela tiene esta fea costumbre de agregarle o quitarle medias horas al horario del resto del mundo, la lista de lugares del mundo en donde hacen algo similar son:
1. Hawai, -9:30 horas con respecto al meridiano de Greenwich
2. Canadá (Hora del Este), -3:30
3. Venezuela, -4:30
4. Irán, 3:30
5. Afganistán, 4:30
6. India, 5:30
7. Sri Lanka, 5:30
8. Nepal, 5:45
9. Myanmar, 6:30
10. Australia (hora central), 9:30
11. Nueva Zelanda, 12:45
Y como pueden ver, no sólo usan medias horas. A Nueva Zelanda se le ocurrió usar husos horarios de cuarenta y cinco minutos!! Alguien en el Observatorio de Greenwich debe estar estresadísimo con eso…
2. Junto con viejos amigos de batalla, escribimos el piloto de una serie cómica de televisión. La idea tiene muuuucho potencial ahora nomás falta encontrar una productora que quiera hacer el piloto y una televisora que quiera comprar la serie. Nomás. La verdad es que escribir comedia es de las cosas más complicadas pero también de las más divertidas que hago. Para el piloto tuvimos más de seis tratamientos prácticamente distintos el uno del otro y no fue sino hasta el séptimo que más o menos estuvimos de acuerdo todos en todo. El único problema que tenemos es que es demasiado largo; una serie cómica de televisión dura 22 minutos, lo que significa un guión de 18 páginas. En nuestro último conteo, el guión era de 47 páginas.
3. Descubrí que lo mío, lo mío, lo mío, es aprender. Así de ñoño y así de directo. Aprender. Cualquier actividad que me permita aprender algo es una actividad que quiere estar en mi lista de cosas por hacer. He comezando, por ejemplo, a aprender de tipografía. Ahora sé que las letras tienen ojos, colitas, hombros, piernas, espinas y brazos. Y si no fuera tan mal dibujante, estaría a tres de comenzar a fabricar mis propias tipografías. Mientras tanto, he comenzado a acumular odio diario contra la Times New Roman. Estoy a nada de formar un grupo de Facebook en contra de esa tipografía fea.
4. Y hablando de Facebook, me saca mucho de onda que gente que yo conocía en la primaria/secundaria/prepa/universidad, esté en FB. Lo que me freakea es ver que X y Y sean amigos en Facebook mientras que en la vida de la primaria/secundaria/prepa/universidad no se toleraban (en el mejor de los casos) o terminaron a golpes (en el peor). No logro hacerme de una imagen mental de mis compañeritos de escuela ahora crecidos, con trabajos, esposas e hijos. Cualquiera que los hubiera visto en alguna comida de la prepa no hubiera dado un quinto por ellos y ahora son respetables (o «respetables») jefes de familia. Facebook y su capacidad de unir personas que no tienen absolutamente nada en común más que un perfil en línea y un ligero saludo por el pasillo de una escuela en 1996, merece un largo ensayo que algún día haré.
5. Otro ensayo que tengo muy pendiente es sobre Ayn Rand y por qué los mexicanos deberíamos leerla más. El escrito sería un primer paso, pero también ha cruzado por mi mente la posibilidad de una fundación que se dedique a a) comprar y regalar a escuelas los libros de Rand y b) a darle cursos a maestros para que puedan guiar a sus alumnos en la lectura de los libros. Creo fervientemente que a este país le hace falta leerla para así irnos quitando ideas anquilosadas del imaginario nacional.
6. Este ha sido el año en el que cumplí treinta años y estoy a cuatro meses de cumplir 31. Debo aceptar que me ha gustado esto de tener 30; claro, no dejo de tener muy presente que es justo en esta época de la vida en la que uno, como dijera un personaje Héctor Aguilar Camín en ‘La Guerra de Galio’, «pasa de ser una joven promesa a un pobre pendejo».
Para quienes se estresan -como yo- pensando que a sus treinta años no han revolucionado la forma en la que se mueve el mundo, les dejo este link de las personas que tuvieron éxito después de los treinta años. Siempre es mejor recordar que Han Solo (bueno, Harrison Ford) tenía 34 y no que Mozart triunfó a los 4 años.
7. Leí en el blog de Andrés Lajous, una descripción perfecta de este blog (y todos los demás, para tal caso): Tras un rato de leerlos me pregunto otra pregunta zizekiana ¿que no lo blogs sirven para reflejar las mentiras que nos contamos a nosotros mismos sobre nosotros mismos? (link, acá)
8. Finalmente, y no más porque los quiero harto porque no han dejado de visitar este blog, les dejo un cover BOENÍSIMO. Púchenle al play.
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Old School
Debo confesar que ver ese logotipo de nuevo me trajo viejos recuerdos…
Me Acuerdo
Para entender este post, hay que leer este post de Mariana H.
Me acuerdo de dormir muy alterado las noches antes de ir a Reino Aventura.
Me acuerdo de mi mamá corriendo tras un camión de bomberos un 5 de enero.
Me acuerdo del olor al cigarro de la alfombra de la oficina de mi papá. A la fecha, el olor a cigarro viejo me sigue gustando.
Me acuerdo de que, cuando los artículos del supermercado no tenían el precio, había que regresarse a buscar uno que sí lo tuviera.
Me acuerdo de las dos primeras veces que vi un rayo láser. La primera fue en un súper, la segunda fue en un reproductor de CDs. Las dos fueron en Toronto, Canadá.
Me acuerdo de cuando me gustaba el huevo con jamón y salsa catsup.
Me acuerdo de jugar canicas en calles empedradas de Michoacán.
Me acuerdo de fantasear con subirme a un avión con una botella de talco para soltarlo mientras volaba. Me acuerdo de pensar que con eso, la gente creería que estaba nevando.
Me acuerdo de pasar a la Baguette de Insurgentes, frente a Plaza Inn, todos los domingos después de acompañar a mi papá a correr al canal de Cuemanco. Yo llevaba mi bici.
Me acuerdo de comer sandwiches de mayonesa en casa de mis abuelos.
Me acuerdo de hacer márgenes de color rojo el primer día de clases. Me acuerdo de cómo lo odiaba.
Me acuerdo de dormirme más tarde viendo el especial de David Copperfield en canal 5. Me acuerdo de la sensación tan avasalladora al ver la magia. Afortunadamente, eso aún no se me quita.
Me acuerdo de cuando Cablevisión tenía 14 canales. Y su logotipo era en forma de corazón.
Me acuerdo de cuando lo más complicado de mi vida era una maqueta de plastilina.
Me acuerdo de cuando mi mayor hit era aprender a manejar.
P.D. Las bases para el concurso «Me Acuerdo» están aquí. Y no, yo no pienso participar.
Gorjeo
Pues sí, pa’ que negarlo… ahora también estoy en Twitter. Y eso ha hecho que descuide este lugar. Damn! Perdón, blogcito, te juro que en cuanto me aburra de twittear -o encuentre un nuevo distractor- regresaré para acá.
Mientras, soy @salvadorleal
Dismal
No hay más que decir.
Zen V
Pierde diez minutos viendo este video. Yo lo podría ver horas.
Si tienes buenas bocinas, trépale. Suena bonito.
Cuántico
¿Por qué, Señor? ¿Por qué a mí me llegan este tipo de correos electrónicos?
¿Qué tengo que hacer con ellos? ¿Acaso son una señal que estás tratando de enviarme?
¿Podrías ser un poco más claro que un mail que dice «Física Cuántica Aplicada a tu Vida Diaria»?
Dios… ¿te das cuenta lo ridículo que suena?
Creatividad
Hay conceptos en los que me gusta clavarme mucho. El humor y lo que hay detrás de un buen chiste. La armonía. El equilibrio (que no es lo mismo que la armonía, como lo dije por acá). La libertad. La creatividad.
Para mí, la creatividad es uno de esos músculos que tienen que ejercitarse diariamente. Es como cuando escucho a los maratonistas (o que hacen triatlón, o a los que adooooran hacer ejercicio) y que nomás no pueden dejar de hacer eso que al resto de los seres humanos nos parece poco menos que irracional. Así pasa me pasa ejercitando la creatividad; nomás no me gusta parar y ya estoy pensando en otra situación en donde pueda ejercitarla de nuevo. Por ejemplo, la primera hora de mi día en la oficina trato de dedicarla únicamente a leer/ver/escuchar cosas que le puedan dar cuerda a mi creatividad para el resto del día.
Esas cosas que leo las comparto con el mundo (aquí, de hecho) y ciertas cosas más específicas se las mando a mis amigos más cercanos, a los que pienso que les pueda gustar. «¿Y tú lees todo esto?» me preguntan, «¿pues cuándo trabajas?». Lo que nunca he explicado es que leer cosas interesantes/locas/fueradelocomún/inútiles es parte (o quiero que sea parte) de mi trabajo diario. Pensar distinto. Pensar cosas que no han sido pensadas antes. O pensar cosas de una forma diferente. Aspiro a que un día de estos, la descripción de mi trabajo tenga esas frases.
Pero bueh, ya me clavé. El asunto es que hace unos días leí este post: The Little But Really Useful Guide to Creativity de un blog que sigo y que se llama Zen Habits. Pues bien, me pareció muy interesante, directo y muy útil. Así que, como ejercicio para ponerme a pensar en cada uno de los tips de este post, he decidido traducir los tips que dan para ejercitar la creatividad. Aquí van:
Juega
No seas un consumidor y un creativo al mismo tiempo -separa los procesos
Aislate del resto del mundo
Reflexiona diariamente sobre tu vida y tu trabajo
Busca inspiración a tu alrededor, en los lugares más pequeños
Comienza poco a poco
Lo que tengas, sácalo. No importa que asqueroso sea tu primer borrador
No busques la perfección. Sácalo de inmediato y busca retroalimentación.
Hazlo mejor, constantemente
Ignora a los pesimistas
Deja que la crítica te ayude
Enseña y aprenderás
Agita las cosas, busca nuevas formas de ver las cosas
Aplica lo que sabes en otros campos que no sean los tuyos, en formas que no se hayan hecho antes
Toma cantidades ridículas de café
Escribe todas tus ideas inmediatamente
Convierte tu trabajo en juego
Juega con niños
Sal, muévete, ve nuevas cosas, habla con nuevas personas
Lee salvajemente cosas distintas. Especialmente cosas con las que no estás de acuerdo
Descansa mucho. Demasiado trabajo mata la creatividad
No lo fuerces. Relájate, juega y comenzará a fluir
Permítele a tu mente que se disperse. Permítete distracciones cuando buscas inspiración
Después, aíslate de esas distracciones cuando estés creando algo
Hazlo cuando estés emocionado
Cuando no lo estés, busca algo que te emocione
No tengas miedo de ser estúpido o tonto
Las pequeñas ideas son buenas. No necesitas cambiar el mundo -sólo cambia una cosa
Cuando algo esté acabando con tu creatividad, acaba con ella
Deja de leer consejos para la creatividad, pon todo a un lado y sólo crea
Pero sobretodo, diviértete mientras lo haces.