Archive for enero, 2009
2009
1. Pues comenzó el nuevo año y este blog nomás no había posteado. Lo siento, trataré de hacer un recuento de las múltiples cosas que han pasado y verán que he tenido muchas razones para no haber escrito.
2. Como nos habíamos quedado en la última serie de posts, me titulé. Ahora sí, la gente por la calle me puede decir ‘licenciado’ sin temor a equivocarse o herir susceptibilidades. Nomás me tomó cinco años y tres temas de tesis distintas pero al final quedó. ¿El tema de mi tesis? Etiquetado de transgénicos. Groundbreaking y breathtaking, lo sé. Tengan en cuenta que mi primer acercamiento a la titulación incluía una investigación de campo en países musulmanes; y si con esta última línea no se convencen de que me gusta complicarme la vida, no sé qué más necesitan.
Mientas que hordas de economistas de mi generación hacían maestrías (hasta dos) y doctorados, yo todavía no me titulaba. ¿Cómo era eso posible? me preguntaban mis allegados. Aaaaahhh, contestaba yo, lo que pasa es que ninguno de mis colegas contemporáneos ha estado cinco años escribiendo un blog. Porque justamente, ese es otro de las cosas que sucedieron en estas últimas semanas…
3. Mi blog cumplió cinco añotes. Un lustro de mantener y shinear (y revampear) SalvadorLeal.com no cualquiera. En el blog he encontrado un espacio para aventar pa’rriba las ideas que se me ocurren, las cosas que veo y -poquito- las cosas que me pasan. Creo que, haciendo un balance, los cinco años de mi blog dan resultados bastante positivos; no porque me haya ahorrado una lana de terapia (aunque también), sino particularmente porque gracias al blog me he podido encontrar con una gran cantidad de personas talentosas, divertidas e inteligentes que de ninguna otra forma me hubiera topado.
Leerlos primero y conocerlos después, han sido de los fenómenos más extrañamente agradables a los que me he visto expuesto. Supongo que es una nueva forma de hacer amigos que, como la Sección Amarilla, funciona y funciona muy bien. Un abrazo grande, grande, tan grande como el blogroll de la derecha que leo religiosamente, a todos mis amigos, panas, comparsas y colegas bloggeros. Nunca cambien, valen mil. Y si cambian, no duden en postear sus razones (je).
4. Otra de las razones por las que no me había titulado podría haber sido la falta de necesidad. Resulta que para estudiar una maestría uno debe estar titulado de una licenciatura (duh) y pues yo ya tenía hasta mi credencial de (neo)alumno de la maestría pero de mi título ni sus luces. Vaya, nada como ponerle algo de emoción al asunto de la titulación: si no te titulas no sólo no serás licenciado sino que tampoco podrás entrar a la maestría y los bocadillos y bebidas de la recepción tendrán que tirarse a la basura o dársela a los niños pobres.
Viéndolo de otro lado, en estos cinco años no dejé de ser ‘alumno’ y cuando finalmente tengo la oportunidad de dejar de serlo, decido inscribirme en una maestría para mantenerme en el redil. Ahí les dejo el dato para su interpretación favorita.
5. Diciembre también marcó otra fecha de celebración: llevo seis meses yendo al gimnasio. Como en otra ocasión les platiqué, Martha y yo nos inscribimos en un ‘fitness club’ que más bien es el centro social más vibrante del momento; yo lo considero ‘el Califa de los gimnasios’ pues no hay día en donde no me encuentre a alguien conocido. A Javier Solórzano ya no me lo he encontrado, pero la otra vez estuve conviviendo con Zague en los vestidores y hasta miembro de la Selección me sentí. Y si no me encuentro a nadie famoso, no falla que está algún exalumno del CUM, o del ITAM. Me cae que un día de estos hasta un blogstar me voy a encontrar en las caminadoras.
6. Por cierto, hablando del gimnasio, aún no se sienten las multitudes que pusieron «hacer ejercicio» en el primer lugar de su lista de propósitos para el año nuevo. No sé si sea la crisis o que simplemente no les ha dado tiempo de ir a que les den el tour por el lugar. En pensamientos aleatorios adicionales, la otra vez llegué a las 6 de la mañana y había COLA para entrar al lugar!! ¡¡COLA!! Háganme el favor. Los sportjunkies son toda una raza que me sorprende día a día.
7. Para no fallarle este año, comenzamos con dieta baja en carbohidratos para eliminar los kilitos acumulados. De vuelta al queso panela a la plancha, las ensaladitas y las comidas altas en proteínas. Adiós a las tortillas y el pan. Adiós, pues, al 70% de la comida mexicana. Si todo sale bien, con esta dieta y el ejercicio, para el 2012 estaré listo para posar en la portada del Men’s Health.
8. El 2009 también marca una nueva temporada de «La Vida Irreal de Salvador Leal» (traducida en otros países de habla hispana como «La Culpa de Todo la tiene Salvador Leal»). En esta nueva temporada, aparte de una maestría, nuestro joven protagonista cumple 30 años y sus escritores deciden que es hora de ponerle un poco de ‘Friends’ a su serie mudando no a uno sino a dos de sus amigos al mismo edificio donde él vive. Y no a cualquier tipo de amigos, no señor. A los cuates con los que escribe un sitcom. De la nada, eso se convierte en un sitcom acerca de escribir un sitcom. Es como «Nobody’s Watching» pero en México. A ver qué pasa.
9. En mis vacaciones se me ocurrieron varias ideas. Una de ellas (la más pegadora) la publicaré en el siguiente post. Seguiremos informando…