Leaving on a jet plane
El Periférico me ayuda a pensar.
Algo que López Obrador nunca tomó en cuenta cuando dio la justificación para los segundos pisos, es que ese tiempo que pasan los capitalinos en el tráfico no es tiempo perdido, muchos lo ocupamos para reflexionar de diversos temas que acongojan nuestra alma.
El día de hoy, por ejemplo, me vino a la mente una pregunta. ¿Existen los pilotos-mujer?
No sé cómo decirles… ¿pilotas? ¿she-pilots? ¿pilot-ettes?
Lo curioso es que uno piensa que 26 años recorriendo este planeta le bastan y sobran para conocer los secretos de la humanidad… y es claro que no!
Yo no sé qué haría si un día me subo a un avión y, mientras me abrocho el cinturón, una voz femenina me da la bienvenida y se escucha por el altavoz del avión «Buenos días, les habla la Capitana…»
¿Es eso posible? Y si lo es… ¿qué reacción tendría?
Digo, no es que yo sea machista, pero las mujeres no manejan un coche muy bien que digamos, por lo que no tengo evidencia de que puedan hacerlo mejor con un avión.
Ven… si les digo que el Periférico me ayuda a pensar.
Idioteces, pero pensar al fin y al cabo.