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La vida irreal de Salvador Leal

Archive for the ‘pointless a secas’ Category

Frey

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Después de años, qué digo años… DÉCADAS!! finalmente 1) encontré la canción y 2) supe cómo se llamaba y quién la tocaba. Una menos para la lista.

Cualquier capitalino que haya escuchado radio durante los últimos veinte años y puesto un poquito de atención a los comerciales, seguro reconocerá la tonadita.

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Frank Mills – Spanish Coffee

Written by Salvador Leal

febrero 22nd, 2009 at 2:18 am

Zen II

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Mi momento zen del día:

Written by Salvador Leal

febrero 5th, 2009 at 12:25 pm

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En tiempo real II

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O quizás podría dar para un capítulo como el de Seinfeld cuando no encuentran el coche en el estacionamiento…

Mientras, grito auxilio por todos lados por donde puedo: SMS, twitter, facebook, messenger y este blog. Es algo así como ‘Message in a Bottle’ pero versión 2.0

Written by Salvador Leal

febrero 4th, 2009 at 10:46 am

En tiempo real

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Se me acaba de ocurrir una idea al estilo de ‘La Terminal’ pero aplicada a nuestro Mexiquito.
La premisa es la siguiente:
Un joven profesionista acude a un centro comercial temprano por la mañana y, al tratar de salir para dirigirse rumbo a su oficina, descubre que no puede salir del estacionamiento porque el tráfico de alrededor no lo permite.
Al no poder salir, decide hacer su vida en el centro comercial.

Fin.
… espero que le vaya bien al protagonista, porque mientras posteo esto, justamente es lo que sucede allá afuera. Gracias a Dios, Starbucks tiene internet y yo traía mi lap en el coche. Fiuf!

Written by Salvador Leal

febrero 4th, 2009 at 10:41 am

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Back 2 School

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1. Si yo tuviera dos rayitas menos de hiperactividad, me cae que me gustaría estar en la escuela el resto de mi vida. Después de la maestría, hacer un doctorado, dar clases, hacer investigación, estudiar un post-doctorado y luego ser profesor emérito para morir frente a la máquina de café en la sala común de maestros. Las escuelas son la mejor barrera contra la realidad que puede existir.

2. Regresar a la escuela ha traido a mi memoria lo mejor y lo peor de ser estudiante. Hay casos en lo que lo mejor, justamente también es lo peor. Escribir a tres tintas, por ejemplo… ya se me había olvidado lo fan que soy de tomar apuntes con pluma negra, roja y lápiz.

3. Mis compañeritos de maestría se dividen básicamente en dos: los que trabajamos y los que acaban de salir de la universidad y decidieron seguir la maestría en lugar de pelearse a muerte por un sitio en el mercado laboral. Con todo el dolor de mi corazón (y de mi ‘niño interno’) debo decir que las clases más entretenidas son en donde la mayoría trabajamos y tenemos más experiencia en La Vida®. Las más chafitas son las que están llenas de personas que no han tenido que vérselas con el Sr. Gutiérrez de Contabilidad que no quiere cambiar el número de una factura.

4. Me pregunto cómo sería si yo estudiara la maestría de tiempo completo. Seguro iría de jeans y playera (contrario al traje y corbata que caracteriza a quienes corremos de la oficina al salón de clases), comería en la escuela y buscaría el mejor pretexto para no entrar a la clase de 7. Supongo también, que viviría con menos estrés tomando en cuenta que no tendría que resolver los problemas de mi oficina Y leer las lecturas Y hacer el trabajo de investigación Y estudiar Y hacer la tarea. La verdad veo mis opciones y creo que elegí bien, hasta eso me gusta trabajar. Nomás me gustaría poder trabajar de jeans y playera.

5. La gran diferencia entre mi última experiencia escolar (la licenciatura) y ésta (la maestría) es, desde luego el papel de las computadoras en el salón de clases. Sigo pensando que es medio mamila tomar apuntes en una laptop; y no sólo mamila, creo que también rompe con la lógica de «los apuntes», esos garabatos que distingues porque son tuyos y que pueden ser tan crípticos como: PP -> mejorar sociedad, fines / NO Schopenhauer. Y a eso aderezarlo con flechitas, correcciones a lápiz, adiciones y hasta dibujitos didácticos que ayudan a completar la idea. Reto a cualquiera a que pueda hacer eso en Word.

6. Hablando de los monitos, recuerdo con mucho cariño los dibujos que Pato y Villamil, compañeros de la prepa, ponían en sus respectivos libros de Inglés en la clase del profesor conocido como ‘El Arañita’ (más de eso, acá). Eran simplemente geniales. Si puedo, un día de estos se los escaneo y pongo aquí. Aunque, como todos sabemos, no hay nada como vivirlo: un chiste siempre será mejor si al reirte arriesgas tu calificación mensual.

7. Estudiar una maestría me ha confirmado que hay una enorme necesidad que no ha sido resuelta aún en esta ciudad. Y eso consiste en la enorme demanda de servicios comunes y corrientes a horas no tan comunes ni corrientes. Si antes no tenía tiempo de irme a cortar el pelo, ¿por qué no existe un servicio de peluquería que abra a las 10 de la noche? ¿o el dentista? ¿o el taller mecánico? Las papelerías de 24 horas ya están muy demodé; creo que lo de hoy debería ser poder ir al gimnasio de 2 a 4 de la mañana justo después de ir con el doctor a que te revise esa carraspera que no te deja en paz desde hace dos semanas.

9. Hay un detalle que se me escapa. Soy un antisocial de closet; siempre lo he sido y creo que siempre lo seré. Y un salón de clases suele ser perfecto para aquellos que, como yo, preferimos llegar a un lugar, escuchar, aprender y largarnos sin dirigirle la palaba a nadie. La gente y yo simplemente no estamos hechos para convivir… Hasta hace un par de clases, me habían obligado a interactuar con mis compañeritos («hagan grupos», «traigan un trabajo en equipo»…), pero ayer que tuve que llevar la laptop para hacer ejercicios en clase, encontré la excusa perfecta para no tener que hablar con nadie más durante el receso: Google Reader.

10. Caí en cuenta que esta es la cuarta universidad de la que soy alumno. Igual y en una de esas, me podría convertir en ‘catador de Universidades’.

Written by Salvador Leal

enero 28th, 2009 at 2:51 pm

Día 1

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Barack Obama: ¿Y bien, qué es lo primero en la agenda?
Jefe de Gabinete: Bueno, hay esta urgencia…
BO: ¿Qué? ¿Irak? ¿Israel?
JG: No, señor Presidente, más bien…
BO: ¡AH! Ya sé, la economía, claaaaro, cómo se me podría haber olvi…
JG: Esteee, no señor, la verdad es que tenemos que hacer esto con la mayor urgencia pues…
BO: No creo que me estés hablando de problemas de inmigrantes, ¿o sí?
JG: No señor, uhmmm, más bien… lo que pasa es que la gente de Disney está sobre nosotros.
BO: ¿Disney? ¿Los de los parques y las películas?
JG: Sí, señor.
BO: ¿Y qué de ellos puede ser tan urgente?
JG: Bueno… es que ellos… pues necesitan urgentemente que les grabe algo que usted tiene pendiente…
BO: ¿Uh?

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Written by Salvador Leal

enero 20th, 2009 at 1:23 pm

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Zen

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Mi momento zen del día:


Bars & Tones from André F. Chocron on Vimeo.

Written by Salvador Leal

enero 9th, 2009 at 10:52 am

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Musa paradisiaca II

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A una semana del inicio de la Dieta de la Musa Paradisiaca, el resultado: -1.54 kgs.

A ver si se mantiene la tendencia…

Written by Salvador Leal

noviembre 14th, 2008 at 10:50 am

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Musa paradisiaca

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Ese es de los datos inútiles -pero curiosos- que me sé, que más me gustan: el nombre científico del plátano es «musa paradisiaca».

**

Todos los días recibo, sin exagerar, alrededor de 12 newsletters que versan sobre distintos temas. Todos ellos serios, todos ellos extensos, todos muy interesantes. El de hoy, cortesía del Harvard Business Publishing dice:

Japanese consumers eager to try the latest fad diet to sweep the country — the Morning Banana Diet — are finding it difficult to purchase the fruit that gives the diet its name. Invented by a pharmacist, Sumiko Watanabe, to help her husband, Hitoshi, lose weight, the Morning Banana Diet took off when he discussed his weight loss of 37 pounds on mixi (www.mixi.jp), one of Japan’s largest social networking sites. When a TV show profiled an opera singer who lost 15 pounds in 6 weeks on the diet, a banana shortage was born.

Life Corporation, which runs 201 supermarkets throughout Japan, has seen a 70%-80% increase in weekly sales, and Dole Japan, a leading importer, has boosted imports by 25% — and still can’t keep up with demand. Books about the diet have so far sold about 730,000 copies.

Así lo como lo leen. La Dieta de la Banana (sé que se dice ‘plátano’, pero no suena tan catchy) parece ser una sensación en Japón. Por lo menos así lo demuestra el aumento en el consumo de plátano. ¿Qué es lo increíble? Que es facilísima. ¿Qué onda… la intentamos?

Reglas (tomadas vilmente de internet, googléenlo ustedes si no me creen)

Desayuno
Uno o más plátanos, hasta que ya no tengas hambre. Sólo plátanos. Acompáñalos con agua simple al tiempo.

Tentempié
Algo ligerito para aguantar para la comida.

Comida
Lo que quieras.

Cena
Lo que sea mientras que sea antes de las ocho de la noche. No puedes comer nada después de esa hora. Otra cosa importante es que te tienes que ir a dormir antes de la medianoche. No hay excusas; para las 12, tienes que estar dormidito.

Como se pueden dar cuenta, la dieta tiene la fórmula perfecta de «metafísica» (el agua al tiempo y dormirse antes de la medianoche) y también es lo suficientemente fácil para quien puede controlar una de sus comidas al día, pero no todas (nunca falla que uno no puede salir a comer y tiene que pedir o ir a la maquinita de las botanas).

Este lunes comienzo. Les voy contando cómo me va.

P.D. Aquí les dejo un artículo de la revista Time acerca de la dieta.

Written by Salvador Leal

noviembre 7th, 2008 at 7:01 pm

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Lunes

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Los lunes son asquerosos. Es el regreso a la chamba, dejar a un lado el fin de semana, terminar con los pendientes que no se pudieron resolver el viernes por la tarde y un largo etcétera.

Pero el lunes tiene una mejor cara cuando tu mejor amigo -el iPod- te pone una canción que hacía años no escuchabas, que te hace recordar muy buenos tiempos y que, simultáneamente, queda perfecta para la actualidad.

Sin más, los dejo con esta bonita rolita que muchos reconocerán por haber salido en una peli de Oliver Stone, escrita por Quentin Tarantino…

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Leonard Cohen – The Future

Written by Salvador Leal

noviembre 3rd, 2008 at 1:34 pm

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